miércoles, 20 de mayo de 2009

Ego, Ida e Indecisión

Si, justamente eso. Ego, Ida e Indecisión. No, no lo saqué de La Ilíada, esos son, más o menos, los temas de los que pensaba hablar: mi gran victoria en la lucha contra mi ego, el hallazgo de Ida, y la indecisión sobre cuál de los dos temas debía hablar. Teniendo en cuenta que el segundo atañe a toda la humanidad y el primero es un tema meramente personal, pienso dividir la columna y hablar de los dos.

Ahí está, esas pulseadas chiquitas siempre me las gana el ego, ese yo que vive adentro mío y tiene la mala costumbre de anteponerse a todo. El que me lleva a hablar de mí seguido en el blog (sí, como hoy) y a hacer muchas cosas para quedar feliz, y que generalmente gana. Y digo generalmente, porque el martes le gané una batalla importante: busqué ayuda. Y no ayuda psicológica, ya me acostumbré a mis cosas... busqué ayuda académica. Aaaahhh, no la tenían esa, ¿no? Me asombra que les asombre, después de todo, hace un tiempo (días despues de descubrirlo) escribí que soy humano, y que cometo errores. Bueno, esta vez mis errores fueron en un área sumamente odiosa, y de la que todo ser humano debería intentar escapar: matemática de quinto año.
Estaba en pleno ejercicio de números complejos (un tema de mierda si los hay) y me di cuenta que no lograba resolverlo. Entonces intenté otra vez, y no pude. Y me empecé a calentar. Lo revisé otra vez, y me seguía saliendo mal. Y me seguía calentando. Entonces lo revisé por enésima vez, no me salió y mandé todo al carajo. Y ahí me acordé: martes y jueves clase de apoyo de matemática en el Pre/U. Reproduzco la conversación conmigo mismo:

Ale: -Nah, ni loco voy.
Ale: -Mmm, no estaría mal, así te explican los ejercicios-
Ale: -Dejate de joder, yo puedo sólo, ¡soy Alejandro Rodríguez!- (Ah si, este Ale tiene la moral muuuy alta)
Ale (el más humilde): -No seas imbécil, si no en la clase, con todo el mundo preguntando, no vas a entender nada...-.
Ale: -Esteeeem... Bueno, el martes veo. Pero si tengo sueño no voy-.
Ale: -Genial, estamos de acuerdo. El martes si no tengo sueño vamos-.

Y fui. Después de solucionar la múltiple personalidad temporal que me causó semejante división mental (Ale y Ale volvieron, por un rato, a ser sólo Ale), fui a la clase de apoyo. Y estuvo genial. No sólo resolví esos ejercicios de mierda, sino que también me di cuenta de que me había equivocado en dos idioteces y no me enojé conmigo (seguramente porque el sueño no me lo permitió). Y me sentí re feliz de ganarle al menos una a mi orgullo exagerado (y de demostrarle a los números complejos que no van a poder conmigo). Fin.


Ahora el otro tema de hoy: Ida. No espero que la conozcan, así que se las presento: Ida puede ser (y espero que lo sea) el famoso "eslabón perdido" en la evolución humana. ¿Por qué quiero que lo sea? En parte por darle el gusto a Darwin, pobre viejo, que se tuvo que oponer a un montón de gente por su Teoría de la Evolución... Y porque me gustaría que descubrieran, hasta donde puedan, de dónde cuerno venimos. O sea, no desde un punto de vista filosófico, eso no es tema para estos horarios (la filosofía es más para después de las 3 de la mañana, antes de las 6 y preferentemente en un lugar al aire libre y con cielo estrellado). Lo digo desde un puto de vista biológico-evolutivo-etcétera, porque, con un poco de suerte, podremos echar un poco más de luz sobre los caminos del ser humano sobre la Tierra. Incluso desde que se parecía a un lémur, con cola y todo. Es increíble ver a ese fósil con cola pero con pulgares opuestos, que se parece a un mono pero que pudo haber evolucionado en nosotros. ¿Que habrá vivido? ¿Miraría el cielo como yo, o sólo sería un mono que se rascara la cabeza como yo (pero sin la caspa)? ¿Estoy filosofando y no son las 3? Uh, debo estar mal, mi reloj biológico se adelanta...

En fin, ver ese fósil ahí, pensando que puede tener algo que ver conmigo... Se me eriza la piel. Ah, pará, es porque me abrieron la ventana. Ahora sí, ya la cerré... Decía, ver a ese fósil me hace pensar, me hace preguntarme qué hubiera sido de mí si hubiera nacido hace 47 millones de años...

Pero ta, son las 10 pm, hasta las 3 am no puedo filosofar...

Y ahí queda, suspendida en el éter de Internet una indecisión transformada en bits que hacen letras que hacen palabras que forman esta entrada de blog. Hace 47 millones de años seguro que esto no pasaba...





Suerte en su viaje, Sr. Benedetti, le desea con todo respeto este humilde niño con ínfulas de escritor.

4 comentarios:

  1. v
    m
    r
    el ego me ayuda a sobreeviir muchas veces te confieso.

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  2. ^ master, una cosa es ego, otras autoestima y confianza en uno mismo

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  3. Por qué fuiste si tenías sueño?

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  4. El ego es una cosa que los humanos se inventan vitehhh para creerse que tienen algo especial que los diferencie de las otras persnas y de su aburrido mundo.

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Pase y diga lo que se le ocurra. Gracias.