Nací en Montevideo, siempre viví en Montevideo y probablemente siga siendo así por mucho tiempo más, pero desde que soy de la minoría capitalina (el único en realidad) en cierto grupo de amigos, se me está viniendo el Interior encima. Y no me quejo, está bueno recordar que hay un montón de Uruguay por fuera de Montevideo (uno en la capital se pierde a veces, y se encierra bastante, ¿no?).
Con respecto a eso, el sábado pasado (y el anterior también) me tocó visitar mi ciudad favorita del interior del país, dentro de las pocas que conozco. Por un proyecto de la AUEQ (Asociación Uruguaya de Ex-olímpicos de Química)* pude hacer unas prácticas en el Instituto Eduardo Fabini de la ciudad de Minas, y aunque no estuvimos mucho tiempo, llegué a decir que si no pudiera vivir más en Montevideo, viviría ahí.
Con respecto a eso, el sábado pasado (y el anterior también) me tocó visitar mi ciudad favorita del interior del país, dentro de las pocas que conozco. Por un proyecto de la AUEQ (Asociación Uruguaya de Ex-olímpicos de Química)* pude hacer unas prácticas en el Instituto Eduardo Fabini de la ciudad de Minas, y aunque no estuvimos mucho tiempo, llegué a decir que si no pudiera vivir más en Montevideo, viviría ahí.
Lo cual es mucho, muchísimo decir para alguien que vivió toda su vida en Montevideo, y está perdidamente enamorado de su ciudad (por eso la critico tanto, no me gusta verla así). Siempre dije que la única manera de que no viviera en Montevideo, sería vivir fuera del país. Ahora tengo otra opción.
Si algún día tienen posibilidades de ir, vayan. Comer mirando a las sierras, o dar una vuelta por la rambla, valen la pena. Capaz que tienen suerte como yo, y toda la gente que conocen hace de Minas una ciudad más cálida de lo que estos fríos la dejan ser...
Si algún día tienen posibilidades de ir, vayan. Comer mirando a las sierras, o dar una vuelta por la rambla, valen la pena. Capaz que tienen suerte como yo, y toda la gente que conocen hace de Minas una ciudad más cálida de lo que estos fríos la dejan ser...
(Antes de la escena de celos, tu rambla es más linda, Montevideo).
Y antes de escenas de celos de lectores, las ciudades que recuerdo haber visitado son: Melo, Treinta y Tres, Trinidad, Colonia, Castillos (fui a comprar una llave de tuercas) y Paso de los Toros, y ponele que por Pando, San Carlos, Solís de Mataojo y alguna otra haya pasado en ómnibus. Estuve en Salto y Durazno, pero ni me acuerdo como eran. Y el Chuy no cuenta. Los balnearios tampoco, no podría vivir ahí. Si su ciudad está ahí y no es mi favorita, ajo y agua, no puedo andar regalando favoritismo.
Y los alfajores de Minas son más ricos. Fin de los elogios. Hasta la próxima.
*Si les interesa, pueden saber mas sobre AUEQ en su blog (acá). Capaz que el estilo en que se escribe en ese blog les recuerda a un servidor. Capaz que no, cosas que pasan.